Existe una técnica clásica del crítico cultureta: mencionar de pasada el nombre de algún grupo extremadamente raro. Da igual que la relación con el cd sea muy tenue. De hecho, si se tratara del tipo que tocaba en la calle en frente de la frutería a la que la madre del artista iba de joven, también valdría.
Gracias a este método se alcanzan dos objetivos: rellenar espacio sin hablar de la música en sí (máxima aspiración del crítico musical), demostrar que eres el más entendido a este lado de Torrelodones y, por supuesto, hacer que tu lector se sienta totalmente estúpido, inculto o desleal hacia su artista favorito por no conocer a esa gente tan rara.
G. Sanz es un experto en esto.
Como no podía ser menos.
Ahí va su nuevo regalo enterico:
CATE LE BON 'Me oh my' (Irony bored/Popstock!) Valoración: 3,5
Telonera de Gruff Rhys (Super Furry Animals) y vocalista invitada en el inolvidable I Lust U (Neon Neon), la cantautora galesa estrena el sello de su mecenas con un álbum que suena a Nico rediviva. Con Vashti Bunyan y Bobbie Gentrie como damas de compañía, la musa de la Velvet Undergound se reencarna en una decena de perlas folk ensangrentadas de psicodelia sesentera por el filo instrumental de varios ex Gorky's Zygotic Mynci. Definitivamente, el trono del romanticismo oscuro queda a un par de estribillos. Por Gerardo Sanz
Enviado por: Paco Fox